Capitulo IV: Nanster pag 22

Pasaron mas de una semana y no tenia respuesta, en un principio pense que habia hecho una locura y que quizas a ella esa carta no le importara mucho, pero tambien pense que quizas no le llegara y por eso no hubiese contestado. Decidi escribir una segunda carta, pero si la primera vez era dificil escribir unas cuantas palabras esta vez seria bastante peor. Crei que con el tiempo estas cosas deben de aprenderse pero la verdad es que no.

Tarde tres dias en escribir las palabras idoneas para mandarle, la verdad es que ahora mismo ni recuerdo cuales eran, pero se que me quedo bastante bien. Volvi ha hacer lo mismo que en la anterior, dos sobre, una en la que iria la carta dentro del otro sobre. Puse las mismas esperanzas que en la anterior y de nuevo a esperar.

Volvieron a pasar otros diez dias y la cosa seguia igual, yo sin respuesta, pero sin quitarme de la cabeza a esta mujer, la verdad es que ya no sabia ni que hacer, una tercera carta, seguir mandando cartas in saber si las recibe o si simplemente no les gusta que se las mande. Y la verdad es que dicen que a la tercerca va la vencida y volvi a escribirle.

Capitulo IV: Nanster pag 21

Todo comenzo con un simple papel que llevaba escrita unas cuantas palabras, la verdad que aunque no era la primera vez que escibia una carta a una mujer le di mil vueltas para no meter la pata. Tras tres dias escribiendo y borrando cosas decidi que lo que ponia en el papel era lo que queria escribirle. Pase a limpio aquellas palabras en las que decia lo que pretendia decir.

Cogi dos sobres, uno para introducir la carta y otro en el que introduciria la carta y el sobre con su nombre, ya que lo unico que conocia era una direccion que no era la suya. Una vez terminada por mi cabeza se pasaron mil cosas de que la verdad no era el mejor metodo para hacer esto pero era el unico. Espere dos dias mas y al final termine echando la carta al buzon con la esperanza de que cayera en sus manos.

Ahora tocaba esperar hasta que ella la leyera y decidiera si contestar o no, quizas estaba mas nervioso que nunca, porque esta vez no sabria si obtendria respuesta o no, tan solo el tiempo lo diria. 

Capitulo IV: Nanster pag 20

Sin embargo habia sido esta vez algo mas que cariño, algo mas que una persona que tocaba mi corazón y a la que el tiempo me hiciera olvidar. Pero nos separaban muchos kilometros, apenas le conocia y encima mi experiencia como romeo se reducia a practicamente lo que habia visto en peliculas y leido en libros. Y asi nacio Nanster, mi yo romantico, ese que con cien palabras podia decir te quiero y ser lo que yo no era capaz de hacer.

Pero aun asi tenia pensando como hacer llegar mis palabras a la persona que se ha convertido tan especial y recorde que años anteriores una carta me sirvio para ello. Pero en este caso no tenia ni su direccion, ni incluso su nombre competo, un gran error que ni siendo el mejor amante podria resolver. Tan solo una direccion del lugar en el que la conoci, aun asi una direccion en la que enviar mis cartas y que le puedan llegar.

Era una idea un poco absurda, pero tras el paso de un par de semanas no me quedaba otra que arriesgar a un sistema que no sabria que me haria ganar. Y asi comence a escribir la primera carta a una mujer de la que estaba enamorado y seguramente ella ni se acordaria de mi. 

Capitulo IV: Nanster pag 19

Me marcho con lagrimas en los ojos recordando a esa mujer que tan solo unos dias ha convertido mi corazón en una nueva locura, ha despertado al león que dormia dentro y que ahora no puedo callar. De nuevo me marcho sin haber tenido el valor de haberle dicho nada a esa mujer, a esa que en poco tiempo consiguio llenarme la cabeza de pajaros. Por delante me espera un monton de kilometros y un largo trago de olvidos, de dias tristes y de locuras que hacer.

Cada kilometro recorrido es una palabra borrada de mi cabeza, pero aun asi la distancia no borra su recuerdo de mi. Se secan las lagrimas y de nuevo llego a una casa en la que me espera un presente igual que el pasado y sin mucho futuro. Pero el tiempo quizas sea sabio y haga que lo que nacio como un amor, se marchite como una flor en verano y termine con el olvido de esa mujer, 

Pasaron unos cuentos dias, y si la distancia debia ser el olvido, creo que ni aunque estuviese en la luna podria haberla olvidado. Si en algun momento renacio Nanster es en este momento, cuando la locura llega a superar a lo vivido.